domingo, 1 de abril de 2012

"Liberados para liberar" - Sábado 24-III-12


POR LA MAÑANA:
La jornada arrancó a las 9'00 h. con el desayuno. A las 9'30 h. celebramos la "Oración comunitaria" y un cuarto de hora después Don Miguel Díaz Hernández, psicólogo, nos instruyó con su ponencia: "¿Cómo nos hemos de situar ante los pobres y excluídos de nuestro entorno?".
Para ello se fue ayudando de una serie de recursos que apuntamos a continuación -para que cada cual pueda visualizarlos y disfrutarlos adquiriendo así una buena parte de lo  que allí se compartió-; la otra parte que aquí no se halla es original del carisma del ponente que fue transmitiendo en vivo, comentando y relacionando unos elementos con otros para obtener al final una buena enseñanza para llegar a la RELACIÓN DE AYUDA que las personas en situación de pobreza y exclusión social necesitan:

A lo largo de esta mañana se fueron alternando esta ponencia con dinámicas de grupo, algún descansillo y DIÁLOGO constante, interacción de unos con otros enriqueciéndonos mutuamente de todas las aportaciones; el tiempo se nos fue volando y disfrutamos de todo su desarrollo.
A las 14'00 h. llegó la hora del almuerzo y con ello concluyó el trabajo de la mañana.
POR LA TARDE:
Arrancó a las 16'30 h.
La primera ponencia de esta tarde se titulaba "¿Qué hacer para lograr una sociedad no excluyente, sino integradora?". A cargo de Don Jorge Ruiz Morales y Dña. Lucía Fárbole Cuevas, ambos psicólogos del Centro Penitenciario de TENERIFE-II.
Ambos a través de toda su exposición y de las dinámicas de gran grupo y también de pequeños grupos nos fueron ayudando a repensar nuestra "acción voluntaria":
  1. En relación con las personas encarceladas:
    • Practicando la "empatía" pero sin caer en el "complejo de Estocolmo": identificarnos tanto con los internos que acabemos por sentir y pensar exactamente tal como ellos sienten y piensan dejando de lado perspectivas que pudieran dar luz y ya no pueden darla porque hemos optado por hundirnos también nosotros en el pozo.
    • Haciéndonos cercanos, practicando la "escucha, la comprensión y la acogida plena" de cada persona, pero "desde la prudencia" y sin dejarnos llevar demasiado sólo por lo que las personas encarceladas nos cuentan o quieren que entendamos.
    • Desarrollando la ya probadísima vocación al "servicio desinteresado" que se observa en todo el  voluntariado de prisiones,... pero sin caer en el "servilismo y paternalismo", en empeñarnos en hacer todo lo que nos pidan a veces sin pensar si eso que nos solicitan es realmente lo que necesitan de verdad o si acaso con ello lo único que hacemos es perjudicarles más que ayudarles.
    • Viviendo la resiliencia y animando al personal encarcelado a practicarla también en sí mismos; no es fácil pero es una de las claves para "mantenerse vivos".
    • Acompañar procesos de integración socio-laboral, una vez que las personas encarceladas estén ya en la calle: orientándoles, dándoles información de recursos a los que pueden acudir, estar físicamente con ellos en la realización de gestiones,... o bien en momentos de ocio, diversión, etc... ESTAR.
  2. En relación con instituciones penitenciarias y el personal funcionario de las prisiones:
    • Ser comprensivos también con este personal: cada cual está ahí por unas razones y convicciones muy concretas; a veces les juzgamos según su apariencia o gestos que aparentan poca humanidad pero desconocemos las motivaciones y circunstancias que subyacen.
    • Colaborar con ellos en todo lo posible: su trabajo no es nada fácil y menos sabiendo que las cárceles españolas en los últimos 6 años se han hacinado enormemente (presentan una de las ratios más elevadas de Europa y la dotación de personal que atienda al colectivo de presos no ha aumentado en esa misma proporción pero sí se han reducido sustancialmente los presupuestos dedicados a instituciones penitenciarias: no ahora sólo sino desde hace años ya).
    • Mostrar gratitud por su servicio y ayuda: no dar eso por supuesto, todos somos humanos y saber reconocer cada gesto que ayuda a realizar un trabajo sirve para motivar mejores formas de hacer en lo sucesivo.
    • Ser coherentes y facilitar la aplicación de las normativas que rigen en las instituciones penitenciarias: contraviniéndolas haciendo cada cual según le parezca no sólo no ayuda sino que además puede acabar generando muchos problemas incluso al propio personal encarcelado. Conviene respetar estas normativas al 100%.
Concluída su exposición e interacción con el gran grupo, de nuevo Don Dionisio tomó la palabra y nos invitó a  retomar la reflexión acerca de la "Campaña de CÁRITAS 2008-09": pinchen sobre el siguiente enlace-web y se abrirá el power point que nos habla al respecto:
Con ello se dio por concluida la jornada y a las 21 h. tuvo lugar la cena.
Y... hasta mañana.

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